El parlamentario presentó un proyecto de reforma constitucional que establece una exención transitoria del impuesto específico a los combustibles para mitigar las consecuencias originadas por el estado de excepción constitucional a causa del COVID-19.
“Este deterioro económico provoca en lo inmediato, una falta de liquidez en las familias chilenas, toda vez que numerosos empleos están amenazados y miles de micro y pequeñas empresas no tienen los ingresos mensuales que les permitan subsistir”, señala el documento.
En este sentido, el diputado independiente asegura que “urgen medidas que beneficien directamente a las personas, permitiéndoles tener mayor flujo de recursos en la medida en que el gobierno no impulse medidas en favor de quienes viven de su trabajo”.
Explica también que el impuesto al uso de combustible es un tributo “que pesa sobre ciudadanos comunes y corrientes”, que no solo se expresa en el precio del combustible de forma directa, sino que impacta indirectamente en los precios de la economía en general.
“La Ley 18.502 establece y regula dicho impuesto específico a los combustibles, por lo que la presente reforma constitucional tiene por objeto que tal norma se deje sin aplicación durante el tiempo que perdure la actual crisis económica producto del Covid-19”, indica el proyecto.