El traspaso del sistema de transporte público a Vía Alerce ha dejado entre 30 y 35 buses operativos de una flota inicial de 67, generando esperas de entre 5 minutos y más de una hora y media para los usuarios.
Aunque el Seremi de Transportes destaca avances, tres buses son pérdida total y la reparación del resto se extenderá hasta marzo de 2024.
El principal desafío es estabilizar el servicio y reducir los tiempos de espera.