Un nuevo capítulo se ha abierto en la investigación del megaincendio que devastó Viña del Mar y Quilpué en febrero, con la detención y confesión de un tercer implicado. Se trata de E.A.S.I., un funcionario de Senapred y teniente de Bomberos de Valparaíso, quien ha admitido su participación en la generación de los incendios junto a Francisco Mondaca y un tercero, conocido como Franco.
En su declaración voluntaria, E.A.S.I. confesó haber sido contactado por Mondaca el 2 de febrero, quien le propuso generar incendios en el sector Camino Viejo a Santiago, aprovechando las condiciones climáticas favorables. Pese a advertirle sobre el riesgo de propagación, E.A.S.I. aceptó, utilizando dispositivos elaborados con cigarrillos envueltos en fósforos, una técnica que aprendió por Youtube.
“Lancé tres dispositivos por la ventana del copiloto. Luego de eso, nos retiramos del lugar”, declaró el imputado, quien además confesó haber participado en otros tres incendios durante la temporada.
En cuanto a sus motivaciones, E.A.S.I. señaló que lo veía como un “juego que podríamos controlar posteriormente en la emergencia”, revelando un desprecio por la gravedad de sus actos y una desconexión con las consecuencias de sus acciones.
El prefecto inspector jefe regional de la PDI de Valparaíso, Guillermo Gálvez, sugiere que el deseo de protagonismo podría haber sido un factor clave en las motivaciones de los imputados, quienes buscaban ser “héroes” en las emergencias que ellos mismos provocaban.
La detención de E.A.S.I. se suma a las de Francisco Mondaca y Franco, quienes también confesaron su participación en la tragedia que cobró la vida de 137 personas. Las investigaciones continúan para esclarecer las responsabilidades de cada uno de los involucrados en este trágico evento.