En la Escuela Hernando de Magallanes de Punta Arenas las autoridades de Mineduc y Junaeb en la región dieron el vamos al inicio del tercer ciclo de entrega de canastas de alimentos que, en contexto de pandemia, se han estado distribuyendo directamente a los estudiantes. Con este tercer ciclo, se alcanzan 15.711 canastas que satisfacen los requerimientos nutricionales de los estudiantes por un periodo de 15 días hábiles.
“A pesar de las dificultades que la pandemia nos ha impuesto, hemos podido privilegiar la entrega de alimentación a los niños de escuelas que reciben los beneficios del Programa de Alimentación Escolar (PAE) cumpliendo además con todos los protocolos de salud. Ha sido un trabajo no menor de los equipos quienes, junto a los sostenedores, han colaborado cumpliendo todas las medidas sanitarias. Agradecemos a los equipos de las escuelas, que coordinan las entregas, que llaman a los apoderados y que entregan parte de su tiempo para llevar a cabo estos procesos. Recordamos a las familias que las canastas contienen alimentos perecibles, por lo que volvemos ha hacer el llamado a las familias a que asistan cuando las escuelas los citan en horarios y días definidos, que se acerquen inmediatamente respetando además los protocolos”, señaló Paula Vidal, directora regional de Junaeb Magallanes, al evaluar la tercera entrega del año 2021.
Por su parte, el Seremi de Educación, Rodrigo Sepúlveda Tagle, destacó el trabajo que se lleva a cabo especialmente en las escuelas públicas. “Hoy vemos en esta escuela, el trabajo que han estado haciendo los equipos directivos, docentes y asistentes de la educación durante esta pandemia, al coordinar la entrega de canastas y abrir los establecimientos para que sean centros de vacunación. Quiero agradecer a Sol, al municipio por su voluntad de facilitar las escuelas, a la empresa SPA S.A, proveedora de los productos que ha cumplido con toda la formalidad en la logística de armado de canastas, trabajo que se debe llevar a cabo en una zona extrema como la nuestra, en donde la posibilidad de contar con fruta o verduras frescas es un desafío. Todo este trabajo de entrega de alimentación a los estudiantes es un trabajo maravilloso que realizan los equipos de las escuelas al entregarle a la comunidad estos beneficios”, acotó.
Tras haberse suspendido las clases el año 2020, Junaeb modificó toda la logística de distribución para llegar con alimentos a todos los niños que lo necesitan. Sólo en lo que va corrido del 2021, se han entregado 47.147 canastas en toda la región, considerando la tercera entrega que contempla 15.711. A nivel nacional serían 27 millones de canastas desde el inicio de la Pandemia.
Uno de los establecimientos que entrega el beneficio de canastas de alimentación escolar es la Escuela Hernando de Magallanes, establecimiento perteneciente a la Corporación Municipal de Punta Arenas (Cormupa), y que beneficia a 475 niños.
“Nuestra Escuela cuenta con un 90% de vulnerabilidad, tenemos 307 niños que tienen la categoría de prioritarios y 150 preferentes; por tanto, las 475 canastas que se entregan aquí van para esos niños focalizados, que reciben su alimentación cada 15 días. Para nuestras familias, recibir las canastas, son momentos de mucha alegría. Tenemos familias que tienen entre 2 y 4 niños; por tanto, reciben esa misma cantidad de canastas por cada hijo, lo que contribuye a mejorar la economía familiar, sobre todo en la situación de pandemia en la cual estamos viviendo”, informó Sol Aguila, directora de la escuela Hernando de Magallanes.
Junto a lo anterior, Sol Águila agradeció el trabajo de Junaeb en la región, que se entrega a través de sus diferentes programas. “Como Directora de Escuela agradezco al Sistema de Protección Social de Junaeb que combina la ayuda en alimentación para nuestras familias y también suma apoyos en atención en salud que a pesar de la pandemia no se ha suspendido. Agradezco también a toda nuestra comunidad educativa, a los profesores que siempre han estado disponibles para colaborar en la entrega de estas canastas, porque saben que esto va en directo beneficio de nuestros niños”, agregó.
Composición de las canastas
Las canastas cuentan con los protocolos de seguridad sanitaria necesarios para el almacenamiento, y son elaboradas en base a las sugerencias aportadas por la FAO, guías del Ministerio de Salud, recomendaciones de la OMS, del Sistema Elige Vivir Sano, y por el trabajo del Plan Contra la Obesidad Infantil de Junaeb. Tienen una estructura alimentaria que incorpora algún tipo de proteína como carnes procesadas, pollo congelado, atún o jurel en conservas, o huevos, además de cereales, leche, verduras y frutas. Este año se cambiaron algunos productos a nuevos formatos, como barras de cereal o cajas de leche individuales, con el fin de que los estudiantes que vuelvan a clases de manera presencial por turnos, puedan transportarlos de manera más fácil y cómoda.
Programas de Salud
Junto con la distribución de canastas, este año Junaeb también ha reactivado los Programas de Salud para los estudiantes. Estos están divididos en cuatro áreas: Servicios Médicos, Salud Oral, Programas Psicosociales y Habilidades para la Vida. A través de ellos se desarrollan acciones de educación, promoción, prevención, pesquisa precoz, atención temprana y rehabilitación de estudiantes de colegios públicos o particular subvencionados.
Basado en la experiencia de 2020, este año se incorporó un plan especial para darle continuidad a estas prestaciones con el propósito de que no se vean interrumpidas frente a las medidas sanitarias que se adopten en el marco de plan “Paso a Paso”.
Una de las innovaciones fue recurrir a la telemedicina. Para ello, se realizaron capacitaciones online para sensibilizar y habilitar a padres y apoderados como coprotagonistas fundamentales en la realización de tele pesquisas en los hogares. Esto les permite detectar problemas de columna en los niños, como la escoliosis y el dorso curvo, en el que son apoyados por profesores y la red local de salud. En esa línea, también se realizaron dos videos para la pesquisa en el hogar de patologías visuales.
En el caso del Programa Habilidades para la Vida se puede adaptar a remoto en comunas en cuarentena, mientras que el Programa de Salud Oral podrá atender solo urgencias en cuarentena y retomar los controles en cuanto se cambie de fase en la comuna.