Este viernes 23 de octubre de 2020 falleció la técnica en Educación Parvularia que actualmente se desempeñaba en el establecimiento “Juan Ruiz Mancilla” de Punta Arenas, Celia Magaly Loncón Guala (Q.E.P.D.), quien trabajó desde 1993 en la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena.
Celia tenía 53 años de edad. Nació el 15 de julio de 1967. Le sobreviven su esposo Adrián Marín, sus dos hijos y tres nietos. Cumplía labores en el recinto “Juan Ruiz Mancilla” desde la inauguración de éste, en el segundo semestre de 2016. Antes se había desempeñado en el Jardín Infantil “Papelucho” de Porvenir y en el “Bambi” de Punta Arenas. Hubo múltiples palabras de cariño y homenajes a través de Whatsapp una vez conocida la triste noticia de su muerte.
El equipo educativo de “Juan Ruiz Mancilla”, a través de una declaración conjunta, manifestó que “hablar de Celia es hablar de luz, humildad, corazón, amor por las niñas y los niños. Siempre preocupada de su esposo, hijos y, sobre todo, sus nietos, atenta y con especial dedicación a sus compañeras y a todas esas generaciones de pequeños a quienes entregó cada momento. Despedirla es tremendamente difícil, nos hará mucha falta. Donde esté, nos acompañará y guiará para seguir cumpliendo fielmente con nuestro trabajo y con su hermoso legado. Su amado invernadero será bien cuidado y le entregaremos la misma dedicación”.
El equipo, liderado por la educadora Paula Caneleo Pérez, agradeció todas las palabras de apoyo y espera que el dolor y pena pronto se conviertan en esperanza y amor.
La ex directora del establecimiento “Papelucho” de Porvenir, Luz María Arrizaga Gómez, dedicó sentidas palabras a Celia. “Caen gotas de lluvia como un mensaje de paz para el alma de los que hoy sentimos tu partida, ya no serás parte física de un añorado regreso a la normalidad, los espacios educativos dejarán de saber de tu templanza, de tu compromiso y amor por las niñas, niños, por un quehacer educativo que día a día va construyendo saberes y alegrías en nuestros pequeños, parece que fue ayer cuando comenzamos marzo de 2020, cuantas ilusiones y proyectos. El destino y la vida nos sorprende despidiendo a Celia, amorosa mujer, compañera, esposa, madre, abuelita y, para las comunidades educativas de la JUNJI, tía”.
“Que en el espacio universal en que estés, tu espíritu tenga la tranquilad de obras terminadas, allá en ese infinito te sumarás a muchas compañeras que nos precedieron y con las que tuvimos la dicha de abrazar desde distintos planos la misión de la JUNJI. Al sumarme al sentimiento de pesar que tiene nuestra institución, deseo que tu particular forma de ser, sea un bello recuerdo para tus equipos, compañeras, directora, que hoy lloran tu partida y consuelo para tu familia. Celia, recuerdo tus tiempos de inicio aquí en esta tierra fueguina, tus compañeras de aquellos tiempos, estamos en la quietud de las despedidas, atesoramos tu entusiasmo del hacer y gran voluntad para superarte, recordamos el gran amor por tu hija y familia, desde el ‘Papelucho’ evocamos un pensamiento y también una oración por ti, que en paz descanses, fue muy lindo conocerte, caminar juntas y aprender de ti. Siempre un gracias a la vida”, terminó su emotivo mensaje.
En tanto, la directora del establecimiento “Peter Pan” de Punta Arenas, Marcela Arteaga Barría, que trabajó con Celia mientras se desempeñaban en el Jardín Infantil “Bambi”, recordó que la técnica estaba orgullosa de pertenecer a la JUNJI, “día a día fue creciendo profesionalmente, tuvimos la oportunidad de conocer sus grandes fortalezas que recordaremos por siempre quienes trabajamos con ella y amamos lo que hacemos. Una mujer inteligente, fuerte y luchadora, siempre preocupada porque sus párvulos alcanzaran sus aprendizajes, formadora de hábitos siendo muy sistemática, perseverante, ordenada y disciplinada en este hermoso camino de educar, ya que con tu paciencia y paz interior que te caracterizaban, dabas respuesta a cada niña y niño, con el respeto oportuno que era parte de tu vida, de convicciones claras en su quehacer educativo. El Señor te llamó a su encuentro, una gran mujer, hija, esposa, madre, suegra, abuelita, profesional, amiga. Rogando a Él dé la fuerza a su familia ante esta irreparable pérdida”.
La directora regional de la JUNJI, Marisol Villegas Núñez, calificó a Celia como una persona de bajo perfil, “comprometida en el clásico sentido de la JUNJI. Ponía primero su trabajo, defendía los derechos de las niñas y los niños, era prudente y formaba buenas relaciones con las familias de los párvulos. Sentimos mucho su muerte, siempre estará en nuestro recuerdo y con nuestras acciones daremos continuidad a su legado”, concluyó la autoridad institucional.