Dos nuevos grupos de personas serán incluidos al Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), aporte económico que integra el conjunto de medidas que el Gobierno ha impulsado para proteger a los hogares que han visto afectados sus ingresos por el impacto socioeconómico del COVID-19.
Se trata de los pensionados mayores de 65 años que reciben la Pensión Básica Solidaria de Vejez (PBSV), indicación que permitirá sumar en todo Chile a más de 70 mil nuevos hogares. El segundo sector corresponde a aquellos pensionados que reciben un Aporte Previsional Solidario de vejez o invalidez, siempre que su pensión final sea igual o inferior a una Pensión Básica Solidaria (PBS) del mismo tramo de edad.